Estas normas de práctica clínica tienen la meta de ofrecer a los padres, profesionales y otras personas, recomendaciones basadas en las mejores evidencias científicas disponibles, así como “mejores prácticas” de evaluación e intervención para niños pequeños con discapacidades.
Se recomienda que proveedores y familias usen esta guía, reconociendo que la atención proporcionada siempre debe ajustarse a cada persona. La familia y el proveedor son quienes deberán tomar la decisión de seguir cualquiera de las recomendaciones particulares según las circunstancias de cada niño y su familia.
Los principales temas que se tratan en estas normas de práctica clínica acerca de los niños que tienen un trastorno de la motricidad son:
Trastornos de la motricidad en niños menores de tres años.
Identificación y vigilancia del desarrollo para niños pequeños en riesgo de trastornos de la motricidad.
Evaluación e intervención para niños pequeños que tienen un trastorno de la motricidad.