Saludos colegas, el día de hoy, compartimos con todos ustedes, una guía para implementar las metodologías ágiles en la educación, que permiten desarrollar las competencias generales de los estudiantes y que promueven un aprendizaje más práctico y experiencial dentro del aula de clases.
De acuerdo al blog de “Revista Digital – INESEM”, las metodologías ágiles surgieron en la industria del software, cumpliendo estas cuatro premisas (Paulk, 2002):
• Los individuos y su interacción, por encima de los procesos y las herramientas. • El software que funciona, frente a la documentación exhaustiva. • La colaboración con el cliente, por encima de la negociación contractual. • La respuesta al cambio, por encima del seguimiento de un plan.
Las metodologías agiles son un método de enseñanza que persiguen involucrar y hacer mucho más partícipes a los alumnos de su proceso de aprendizaje. Se centran en “aprender a aprender”. Persiguen un aprendizaje exclusivamente práctico y experiencial, en el que el alumnado “aprenda haciendo” con el objetivo de conseguir el pleno desarrollo de su autonomía, sus capacidades y habilidades. Pero ¿Cómo conseguir esto? Relacionando los contenidos con las competencias que se pretendan desarrollar; diseñando actividades de aprendizaje basadas en experiencias reales que consigan estimular al alumnado y garanticen un compromiso emocional y social.
Para finalizar, se muestra, una guía muy interesante que ayuda a los profesores y estudiantes, a comprender de forma amplia, la definición de aquellas metodologías agiles y como se las puede implementar en el aula de clases.